(San Cristobal. 17/08/2022) A lo largo de varios años cuando un grupo del sector de “oposición” ha querido y decidió pactar, mediante el diálogo, con el régimen que nos ha destruido, hemos creído que esto es normal y no lo es. Los derechos no se negocian, la dignidad, la calidad de vida y la libertad de pensar diferentes, no se negocian.
Durante 15 días el gremio docente alzó su voz para reclamar lo que sencillamente les compete, para decir ya basta a un sistema que ha descalificado y desprestigiado un gremio tan importante como lo es la educación. De eso se trata su proceder, la destrucción sistemática de un país y esto comienza por aquello que impide desvelar y hacer consiente al ciudadano. Una Sociedad preparada, formada, ilustrada no permitirá su opresión. La educación ha sido destruida desde la más mínima estructura y ahora no conforme con eso son víctimas quienes aún por vocación están al frente de las instituciones.
La protesta inició reclamando un derecho de ley como los es la cancelación de los días vacacionales y de recreación que merece un trabajador y que decidieron cancelar cuando querían y como querían, pero más allá de esa cantidad de dinero, se exigió y se debería seguir exigiendo en el respeto a cada uno de quienes se esfuerzan por impartir conocimientos en las aulas, el Docente es el menos remunerado en un país donde sus sistema de gobierno quiere sumergir en la ignorancia a la sociedad. Más allá de una cantidad de dinero como anteriormente se mencionó es exigir la dignidad que toda persona humana merece desde los servicios básicos de calidad como el respeto ante una arbitrariedad de disponer de algo que por ley le merece, su salario.
Los días de protesta demostraron que la fuerza está en la ciudadanía, en la organización que se necesita para hacer verdadera fuerza a un régimen criminal que cada día con su astucia pretende mostrarse con una cara limpia ante el mundo. Pero que quede claro que en Venezuela nada está resuelto, que quede claro que se debe seguir exigiendo un salario digno que permita tener la calidad de vida que se merece. Luego de mostrarse el régimen como el mesías y salvador al declarar que cancelaran el 100% como un logro de sus sindicatos socialistas y no de la protesta del ciudadano profesional de la docencia, esperamos cumplan y no sea otra más de sus mentiras, así como se espera seguir mostrando el descontento por el sueldo desproporcional a la cesta y servicios básicos.
Rubén Montevideo
@Rudabenrio
Coordinador Estadal de Comunicaciones de Vente en Táchira
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