Siempre se nos ha dicho que en la unidad está la fuerza, frase casi bíblica que convoca a la concentración de criterios y proceder para alcanzar el propósito. También está su opuesto con la frase: divide y vencerás. Ambas son casi preceptos utilizados para dar aplique a la situación política nacional, empleadas por un sector autoproclamado opositor para seducir a un país urgido de libertad.
La Venezuela secuestrada lleva 23 años deambulando, buscando el camino que la lleve a la liberación. Un país reducido por un régimen que cual mago de la lámpara cautivó, engañó y ahora muestra su esencia maligna como discípulo adelantado de la escuela cubana, la misma que apadrina otros dictadores regionales dando estricto cumplimiento a lo dispuesto por el Foro de Sao Paulo y ratificado por la Convención de Puebla. Su meta es unir al continente en principios políticos pseudo comunistas, principios económicos ruinosos, principios sociales esclavistas y principios culturales que llevan a la ignorancia mantenida.
En ese deambular se han encontrado con un país que los ha enfrentado en todos los terrenos, saliendo su gente diezmada amenazada y errante. La cárcel, el cementerio y el destierro han sido su destino. En ese ataque feroz contra la ciudadanía, se muestra otro sector que cual lobo de Caperucita muestra su mejor gala para convocar, es convincente y atrayente. Pero luego muestra su verdadera faz trayendo frustración y postración. Una partida hasta ahora bien jugada en la que unos procuran mantenerse y otros existir, no importa con que ni a costa de que, de ahí la célebre frase de María Corina vamos a ponerlos contra la pared.
Coordinador de Vente Junín
@luis_carrero11
Dirección y organización en procura del propósito – Por Luis Carrero