Liderazgo con legitimidad
Desde la llegada del chavismo a Venezuela y su afán por mantenerse en el poder, hemos pasado por infinidad de procesos electorales, en los que la mayoría (y sobre todo en los últimos años) han estado viciados de cientos de violaciones, tanto de las autoridades que tienen la responsabilidad de garantizar el derecho a ejercer el voto, un padrón electoral viciado y amañado a favor del chavismo, y por último la acción contra los opositores por parte de los brazos armados y violentos que defienden al régimen.
Procesos electorales en los que hemos participado con una fuerte convicción de cambio. Como por ejemplo las parlamentarias del 6 de diciembre de 2015, en la que hubo una participación del 74,17% del padrón electoral y en que con el 56,2% de los votos elegimos a 112 diputados, que representó la más grande victoria opositora en los últimos años, pero que el régimen se encargó de desconocerla -como siempre lo ha hecho en resultados adversos- y mediante impugnaciones del TSJ, persecución, encarcelamiento y compra de conciencia de diputados opositores la minimizó a tal punto de llegar a desconocerla y montarle luego una asamblea paralela con la constituyente de 2017.
También ha habido procesos electorales en los que no hemos participado, como las parlamentarias de 2020, que solamente tuvieron una participación del 30,18% de la población electoral.
También las realizadas el 20 de mayo de 2018, para elegir al presidente de la República para el periodo 2019 – 2025, en el que sólo participaron 3 candidatos que trataron de dar legitimidad a un proceso proceso altamente cuestionado por su falta de transparencia y de garantías electorales, y cuyo resultado sería desconocido por más de 60 países y organismos como la OEA, Grupo de Lima y lideres del G7.
Más reciente, los venezolanos trataron de recobrar la confianza en el voto, sin embargo la presencia de los llamados ‹alacranes›, la falta de confianza en quienes se postularon por los partidos opositores, resultó en que el en el proceso de regionales del mes de noviembre pasado, acudieron solamente el 42,26% de los electores.
Esto solo es una pequeña muestra del por qué el ciudadano ha perdido la confianza en el voto, y esto ha hecho que cada resultado de los procesos electorales carezca de legitimidad y de la garantía de que este resultado sea respetado o hecho respetar por las autoridades electas.
Toda esta situación ha logrado que los venezolanos perdamos la confianza y la credibilidad en el voto, y peor aún, no confiemos en quienes dirigen los partidos políticos que adversan al régimen.
El 24 de noviembre de 2021, María Corina Machado y Vente Venezuela realizaron una propuesta al país: La elección de un nuevo liderazgo opositoor, que tenga como único fin sacar definitivamente al régimen socialista del poder. Un liderazgo que no se doblegue, que no negocie con el régimen, que no se venda, y que no traicione la confianza de cada uno de lo venezolanos que soñamos con recuperar nuestra patria.
Los venezolanos que realmente queremos ese cambio, necesitamos un proceso que sea confiable, en el que no exista la intervención del régimen mediante ninguno de sus organismos, que sea un proceso transparente, que brinde a quien resulte electo, la legitimidad ante el mundo entero y principalmente ante los venezolanos, los cuales le daremos nuestra confianza y el apoyo necesario, para que con determinación podamos enfrentar en todos los terrenos al régimen socialista.
¿Queremos un proceso electoral, que le de legitimidad a ese líder de la oposición que tendrá la responsabilidad de enfrentar al chavismo?
Como ciudadanos debemos exigir las siguientes condiciones:
1 – Voto manual.
2 – Todos los venezolanos, fuera y dentro del país, deben ejercer su derecho al voto.
3 – Organizado por la sociedad civil.
4 – Sin la intervención de ningún ente del régimen (CNE, TSJ, FAN)
La invitación es para cada venezolano dentro y fuera de nuestras tierras, este es nuestro momento, no dejemos que otros decidan por nosotros, el voto es un derecho y un deber, pero solo cuando recuperemos la confianza en que nuestro voto elija, es que estaremos seguros a quien elegir. Solo así, los venezolanos lograremos tener confianza en que la persona que nosotros, mediante el voto elijamos, tenga la legitimidad necesaria para confiarle de nuevo nuestros sueños de libertad y la esperanza de recuperar nuestra hermosa Venezuela.
Líder Fénix de Vente Venezuela en el municipio Barinas.