La hiperinflación venezolana, con el dólar ya devaluado es un descontrol acelerado de los precios de los bienes y servicios, ha sido uno de los procesos más largo de la historia moderna venezolana y la más alta del mundo, superada por la de Nicaragua (1989- 1991) y de Grecia (1941-1945).
Desde los últimos años de la Era Chavista y Madurista, los venezolanos han venido utilizando últimamente el dólar como moneda, la cual ha sido un balón de oxígeno para muchos venezolanos que vieron sus ingresos mermados frente a la caída de la moneda, el bolívar, a la cual se le hizo tres reconversiones monetarias (eliminación de 14 ceros).
Esta dolarización no fue asumida por el régimen, sino por los mismos venezolanos, la cual ha circulado libremente por toda Venezuela, pero el bolívar no ha sido reemplazado, aunque devaluado, igualmente circula por el país.
La hiperinflación es el principal problema de los venezolanos, más que el deterioro de los servicios públicos, la inseguridad personal, la corrupción, entre otros. Esta es una de las causas de la quiebra del Estado y la ruina nacional, esto ocasionó el alto costo de la vida de los ciudadanos venezolanos.
Esta dolarización fulminó los sueldos y salarios de la mayoría de los trabajadores y pensionados públicos que aún cobran en bolívares los bonos del carnet de la patria, como también en Petros.
Esta dolarización perdió gran parte de su poder adquisitivo con la hiperinflación. En primer lugar, acabó con el bolívar ya devaluado, ahora lo hizo también con el dólar. El régimen no se ha dado cuenta que uno de sus tantos problemas es la hiperinflación -la más alta en América Latina y el mundo- y que tiene que buscar correctivos para atacarla estableciendo políticas económicas, financieras y fiscales para solventar la problemática de la crisis humanitaria compleja que atraviesa en estos momentos nuestra nación, que va ya en detrimento del progreso, desarrollo y porvenir de la población venezolana.
“La inflación es como el pecado; cada gobierno la denuncia, pero cada gobierno la práctica”, Georg Lichtenberg
La educación en el tiempo – Por Sandra Dugarte
Sandra Dugarte
Secretaria Política del Municipio Barinas
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