(La Asunción. 21/09/2022) «Es preocupante e indignante que nuestro país, otrora polo del desarrollo de la industria petrolera latinoamericana, esté viviendo situaciones tan lamentables y preocupantes como las que se están evidenciando en las últimas semanas».
Bower Rosas, coordinador estadal de Vente Venezuela señaló que mientras Venezuela se viene abajo con esta empresa fundamental, la cual se encuentra literalmente en el piso, el régimen de una manera pomposa y descarada, trata de vender al mundo que estamos en condiciones idóneas para ofrecer petróleo y gas a fin de asistir a un buen número de países, como si aquí el crudo fluyera con normalidad.
Indicó que existen trabajadores en pésimas condiciones laborales, mala paga, ausencia de seguros, instalaciones petroleras que no cuentan con el mantenimiento mínimo requerido, los constantes cortes eléctricos, los servicios primarios para la industria totalmente deficitarios, sin contar con las florecientes denuncias sobre gravísimos casos de corrupción que se ciernen sobre la empresa Pdvsa y sus cuestionados manejos, son una pequeña muestra de las inmensas fatalidades que arropan a esta industria que ya no representa la columna vertebral del desarrollo nacional.
El dirigente añadió que las manos y los cerebros que se hicieron cargo de esta multimillonaria infraestructura y sus ingentes patrimonios solo estuvieron pendientes de dirigir los recursos para beneficio propio, mientras que no les importó dejar mermar el mantenimiento, cuidado y actualización de la industria clave en la generación de riqueza y bienestar para el país.
Es hora, enfatizó Rosas, de levantar la voz de advertencia ante tanta desidia que, como ha señalado nuestra máxima dirigente María Corina Machado, llevó a que todos los venezolanos tengamos que soportar una de las crisis económica, política, social, y moral más grave de toda su historia, pero también debemos tener la certeza de que hay esperanzas, así como las herramientas y los recursos humanos éticos capaces de liberar al país y transformar a Venezuela en una tierra de gracia.