(Cumaná. 21/02/2022) Los representantes de esta “oposición apátrida” son los mismos hacedores de la “ayuda humanitaria”, que, en Cúcuta, aparecieron drogados en lupanares, en antros, mientras la ciudadanía se enfrentaba a los esbirros del régimen en los distintos puntos de las fronteras, tratando de traer los contamines y alimentos para mitigar el hambre y la desatención en el país.
Los mismos que desaparecieron los cuantiosos recursos y aportes del concierto de la “ayuda humanitaria”, y que ahora reaparecen con el remoquete de “Salvemos a Venezuela” ¿Salvarla de qué? ¿Del hundimiento donde fue llevada por quienes cohabitaron y negociaron con la fe y la esperanza del ciudadano, para luego desfalcarla nuevamente? Así como hicieron con Monómeros, o para lanzarse otro ponche como el de la Asamblea Nacional (2015), donde a pesar de tener las dos terceras partes para reinstitucionalizar a país, que fue la voluntad expresada en el voto, negociaron con ella, entregando así, el CNE, a Contraloría General de república, el TSJ y el Poder Ciudadano en su totalidad.
De los mismos hacedores del mantra: “Cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libre”, a ahora “salvemos a Venezuela”. A este cuento le falta un pedazo y largo, adolece de una historia que a la ciudadanía venezolana y especialmente a la sucrense, debe saber y le está prohibida olvidar; que estos especímenes, quienes fueron capaces de sentarse por más de 19 veces con esta caterva de criminales para no llegar a nada que favoreciera al interese general, sino los suyos, también hay que endosarle el hecho cierto de suprimir toda iniciativa de la sociedad civil, como el esconder la propuesta del Proyecto de la Indexación de las Prestaciones del Patrimonio Laboral, presentada en la AN por la Fracción 19 de junio en el año 2020.
Los que hoy dicen ser los “mesías” para “salvar a Venezuela” son los mismos hacedores de la MUD-FA quienes desde la Asamblea Nacional en la Comisión de Contraloría certificaron y abalaron las negociaciones del hoy “patriota cooperante” Alex Saab”, para que introdujera el país las dadivas CLAP, que el régimen comunista de Maduro dirige para el control social, la misma oposición apátrida que hoy invitan a “salvar” a Venezuela, que participaron en las elecciones del 21 de Noviembre; y en el caso del estado Sucre, jugaron posición adelantada diciendo que Ramón Martínez, había sido designado para dividir, sin embargo, fueron incapaces de unirse al único sentimiento y liderazgo enraizado en la Entidad, por sus apetencias y egos, que al final favoreció a la designación que realizara el chavismo en las alcaldías y en el poder ejecutivo de la región.
Luis Carvajal
Pactar con las mafias: el cese de la oposición – Por María Corina Machado