Han pasado trece años de la primera Reconversión Monetaria en toda la historia republicana de Venezuela. En aquel entonces, año 2008, se le retiraron tres ceros a la moneda, que se manifestó unos años después en un aumento exponencial de devaluación e inflación, trayendo consigo diez años después la segunda reconversión de la moneda, pero esta vez se le retiraron cinco ceros a la moneda.
El plan macabro de destrucción de la economía por parte del régimen, había sido tan brutal para ese entonces que se le tuvo que quitar no tres, si no, cinco ceros a la moneda. Un yunque de 100.000kg a la economía venezolana, aplastándola hasta dejar solo 1kg, es decir, 100.000bs, pasaba a ser 1bs, lo que significó una devaluación del 7.000%.
Hoy vemos como se anuncia una tercera reconversión monetaria en poco más de una década y esta vez, de seis ceros menos. Una tonelada de inflación y gasto público, aunado al gasto que implementarán las empresas privadas al adaptar sus sistemas al nuevo esquema monetario. Un millón de bolívares convertidos en 1, que dentro de pocos años significarán cien millones y que traerá consigo otra reconversión monetaria. Si hoy habláramos de la cifra real, 1 seria =100.000.000 y a partir de octubre será 1=100.000.000.000.000
La cantidad de ceros ya es inmanejable para las máquinas fiscales, al igual que las transacciones económicas que se quedan cortas para el monto permitido por las entidades financieras, y ni hablar del bolívar en efectivo que se volvió polvo y solo quedó para pagar pasaje inter urbano y si acaso.
Pero debemos ser enfáticos en que todos estos factores son consecuencia de un manejo de la economía que de manera intencional es modelo de destrucción del aparato productivo, que genera escasez, mercado negro, inflación, hiperinflación estanflación, etc. Medidas monetarias y económicas que al no venir de la mano con un plan anti-inflacionario, con un nuevo modelo económico de apertura al libre mercado o a la libertad económica, lo que nos indica es un panorama grotesco de más inflación, mas escasez y más mercado negro, en donde se seguirán beneficiando unos cuantos amigos y enchufados del régimen, mientras que el 80% de los venezolanos, continuaremos reinventándonos día a día para sobrevivir.
Mientras el régimen de Maduro continúe en el poder, cualquier plan económico que sea aplicado por ellos afectará de manera negativa al país, porque su intención siempre será la destrucción de la economía para hacernos dependientes de ellos.
Jesús Farias- Coordinador de Vente Maturín