Escribo como venezolano, padre de familia, como hijo, profesional del derecho, como ciudadano de a pie, con el firme propósito de que este mensaje sea leído y compartido por la mayor cantidad de personas, quiero hablarles, no de la actual situación de Venezuela, su crisis económica, social o política, porque la misma, ustedes la conocen también como yo, la sufren y la padecen en mayor o menor proporción que otros connacionales.
Me imagino que habrás pensado muchas veces, cómo sería salir de ella, cómo retomar las riendas del país y enrumbarlo hacia un mejor destino, a puerto seguro, mejorar tu calidad de vida y la de tus hijos. Créeme, es un sentimiento nacional, es un deseo general. La mayoría de nosotros que vivimos y nos quedamos en esta tierra bendita, pensamos como tú, sin embargo, la situación narrada no se corrige con varitas mágicas, culpando al otro o con ofrecimientos mesiánicos.
Lo que sí es cierto y depende de ti y solo de ti, es un cambio de actitud, un cambio en el pensamiento. Si todos mejora su manera de pensar y actuar, juntos y en poco tiempo lograremos fortalecer la unidad necesaria para tomar las decisiones correctas, pensando siempre en el porvenir de nuestros semejantes, para eso, es imperativo, dejar a un lado los intereses personales en beneficio de los colectivos, si luchas, vives, trabajas, estudias y aportas dentro de una sociedad sana, próspera, honesta, libre, emprendedora y segura, serás protagonista, en la construcción de un nuevo Estado liberal, con restablecimiento pleno del Estado de Derecho, con independencia de poderes, de un estado garante de los derechos de sus habitantes y de la justicia social.
Un nuevo país administrado por los mejores hombres y mujeres, honestos y competentes; lejos de la vieja política, apartados de los intereses partidistas y comprometidos por el desarrollo de esta gran nación, llamada VENEZUELA, de esta hermosa y fértil tierra que te vio nacer y crecer y hoy te exige vuelvas tu mirada al futuro. que te pide te llenes de esperanza, de fe y fortaleza, que superes tus estados depresivos, de miedo. Hoy más que nunca te invita a quererte más, a sentirte querido, amado, lleno de optimismo para transmitir los mismos valores, deseos y virtudes a tus vecinos, a nuestros hijos, a nuestras familias, nuestro primer bastión, nuestros hogares, orando juntos, con alegría, que ha llegado la hora de levantar las cabezas, mirar al firmamento, decirnos que sí podemos, que juntos lo vamos a lograr, yo tengo la voluntad, ahora necesitamos la tuya, para salir y seguir adelante, luchando para reconquistar la patria, la soberanía y la libertad.
No es momento de claudicar, por el contrario, una nueva oportunidad se está presentando, hay vientos de cambio y el primer cambio debe ser y empezar por nosotros mismos, el cambio debe ser inequívoco, con convicción,¡si podemos! y merecemos un mejor país, con muchas oportunidades de crecer, de salir adelante, de vivir mejor, de tener a la mano nuevamente el dinero suficiente, fruto de nuestro trabajo, para comprar lo que queremos, de soñar nuevamente con unos ahorritos, para pintar la casa, comprar un carrito, salir a viajar. ¿Lo recuerdas? Te invito a que juntos, rescatemos la institución de las prestaciones sociales, vilmente pulverizadas, rescatemos las jubilaciones decentes,para vivir con dignidad y no de la caridad.
A esta hora, más hombres y mujeres honestos, responsables, profesionales, competentes, miembros de la sociedad civil están dispuestos a dar la cara y colocar sus nombres y experiencia al servicio de la comunidad, personas que viven y sufren las mismas penumbras que tú, pero conscientes de esta nueva realidad, como lo dijo el Papa Juan pablo Segundo “Despierta y Reacciona” el momento del cambio ha llegado y ahora Venezuela necesita de ti.
No es una utopía, los grandes cambios llevaron tiempo, sacrificio y muchas ideas, para materializar los sueños, es necesario libertarse de las opresiones, y esto solo se consigue con perseverancia, remando juntos en una sola dirección, hoy por hoy necesitamos cohesión, organización y comunicación y lo más importante amor por nuestro país, si ponemos los intereses personales en primer lugar esta lucha será estéril, y jamás tendremos los frutos que queremos: democracia, libertad, soberanía, crecimiento y desarrollo económico, es momento de conquistar nuevamente, como lo hicieron nuestros patriotas libertadores, hombres y mujeres, como tú y como yo, algunos con vastas fortunas, que dejaron a un lado sus comodidades para ponerse al servicio de la libertad de los venezolanos.
La patria reclama de nosotros mayor compromiso por ella, la misma, que tanto nos ha dado a cambio de nada, hoy levanta su voz para pedirnos ayuda, no es en vano, que la idea de este mensaje es la multiplicación de las ideas, del mensaje, que llegue a muchas manos a todos los confines de nuestra tierra, cada día estamos más convencidos que es momento de actuar, con fe y esperanza, con Dios por delante, sin él nada, repliquemos el deseo de cambio, de libertad, el mensaje optimista, para emanciparnos de la cubana política, que destruye nuestro país, tres o cuatro personas hablando de progreso, de desarrollo, con ideas claras, esa es la fuerza necesaria para romper la inercia que nos limita en nuestra sociedad.
Estamos a las puertas de un cambio político, con la intención de reestructurar las bases para un nuevo modelo económico, donde se conjuguen las ideas del mercado con la justicia social, donde la libertad de los individuos y la libre competencia existan como valores fundamentales del hombre moderno, donde el trabajo, progreso, calidad de vida y acceso a los productos, bienes y servicios, sean escogidos libre y sin coacción por los individuos de la sociedad y no impuestos por el Estado, donde la dieta que lleves a la mesa, salga de tu elección y preferencia, calidad y cantidad, y no sea la que te han obligado a recibir en una bolsa o caja, como lo hacen en la actualidad.
@frankli93216330
Vente Trujillo