(Mérida. 10/10/2020) El equipo de Universades de Vente Mérida hizo pública una carta dirigida a las autoridades de la Universidad de Los Andes (ULA) en la que insisten en una serie de propuestas que han sido desestimadas y que garantizarían el funcionamiento de la casa de estudios en estas condiciones adversas.
A continuación, la carta íntegra:
Mérida, 8 de Octubre del 2020
Prof. Mario Bonucci
Rector y demás miembro del Consejo Universitario de la Universidad de Los Andes
Presentes.-
Señores consejeros universitarios,
Como miembros de la comunidad universitaria y de Vente Universidad – Mérida, nos hemos dirigido ante este máximo organismo en distintas oportunidades. En nuestras misivas anteriores realizamos propuestas concretas, todas tendientes a contribuir con el cese de la usurpación, como primer paso para poder avanzar en la recuperación de nuestra casa de estudios, que se encuentra sumida en la peor crisis de su historia contemporánea. En resumen, hemos solicitado:
- Que el actual Presidente Interino fuese reconocido inmediatamente después de tomar juramento.
- Que al Presidente Interino se le exigiera nombrar un encargado para la educación superior que estableciera relaciones directas con las universidades.
- Que la Universidad solicitara a la Asamblea Nacional la activación del artículo 187#11, y al Presidente Interino invocar el Principio de Responsabilidad de Proteger (R2P) y la activación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), apelando a la conformación de una coalición internacional de paz que represente una amenaza real, creíble e inminente, para desalojar al actual régimen y sus mafias del poder.
- Elevar ante la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los derechos humanos una denuncia formal ante las amenazas de persecución y amedrentamiento contra los Rectores, demás autoridades y dirigentes gremiales de las Universidades Autónomas Venezolanas.
- Denunciar ante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional el crimen de persecución por motivos políticos de los miembros del personal docente, administrativo y obrero de las Universidades Autónomas, consistiendo dicho crimen en la imposición de condiciones de vida que atentan gravemente o los privan de sus derechos más elementales, a través de la imposición de remuneraciones obligatorias que no llegan a $20 mensuales.
- Hacer un llamado a las demás Universidades Latinoamericanas, a las academias, y a toda la comunidad científica de la región, para que nos acompañen en la defensa de la autonomía y del libre pensamiento en Venezuela.
De todas estas propuestas, el máximo organismo universitario solo implementó la de reconocer al Presidente interino, siendo las demás propuestas desestimadas.
A la fecha, el tiempo nos ha dado la razón. En la Universidad, cada día que pasa es un día más de agonía para todo su personal, un día más de deterioro de las instalaciones, un día más de deserción estudiantil. Debemos señalar que de la mayoría de los miembros de la máxima autoridad de la universidad sólo escuchamos quejas, largos discursos sobre la situación que todos conocemos porque la vivimos diariamente, y finalmente, la misma manera de accionar: el envío de una misiva al Ministerio de Educación Universitaria del régimen, que es el organismo ejecutor de la política de estrangulamiento de las universidades, solicitando que se mejoren las condiciones de cautiverio.
Estamos convencidos que esta manera de actuar no es acertada. La solicitudes realizadas por parte del Consejo Universitario al ministerio del régimen no han logrado que los salarios sean adecuados para cada una de las personas que trabaja en esta institución, tampoco que se detenga la deserción estudiantil, y mucho menos han logrado frenar el creciente deterioro de las instalaciones, o han hecho que se invierta en la adquisición de los equipos necesarios para cumplir con nuestra función docente, de investigación y de extensión; por el contario, las condiciones empeoran, y es solo la mística, entrega y el sentido de pertenencia del personal universitario lo que ha mantenido a la universidad de puertas abiertas en los últimos años. Pero esos esfuerzos heroicos tienden a agotarse en el tiempo, ya que es imposible hacerlo con unos salarios que no cubren ni un día de alimentación.
Esta lucha es existencial, el régimen de carácter castro-comunista-estalinista, tiene como objetivo acabar con la educación, con la ciencia, con la investigación y mantenernos a todos los ciudadanos venezolanos arrodillados y esclavizados.
La Universidad durante toda su historia ha luchado por la libertad de las ideas, por la búsqueda de la verdad y ha defendido los principios republicanos. Sin pensamiento libre no hay creación, no hay avance; sin pensamiento libre dejamos de ser ciudadanos y nos convertimos en uno más de la manada, obligados a ser instrumentos útiles para complacer los intereses de los tiranos.
Las propuestas que les hemos hecho siguen vigentes. Aprovechamos esta misiva para adicionar dos que consideramos pertinentes y necesarias:
- Solicitar ante organismos internacionales tales como: la UE, la OEA, la ONU, el Banco Mundial, entre otros, financiamiento directo a las Universidades Autónomas venezolanas, que les permitan funcionar durante la crisis con salarios suficientes para el personal, becas a los estudiantes e inversión básica en infraestructura.
- Realizar esta acción articulada con todas las Universidades Autónomas del país y desde este espacio impulsar una Operación para la Paz y Estabilización (OPE) en Venezuela, que nos permita efectivamente alcanzar la libertad y restablecer el estado de derecho.
Estamos convencidos de que estas propuestas que hacemos permitirán lograr el fin práctico de mantener a las universidades en funcionamiento, evitar o disminuir considerablemente la diáspora del personal y frenar la deserción estudiantil. Con esta acción, adicionalmente, la Universidad plantará cara al régimen que la quiere desaparecer, ejerciendo su verdadero carácter autonómico y siendo ejemplo de resistencia, desobediencia y rebeldía para todos los venezolanos ante el oprobio que actualmente vivimos.
Hoy más que nunca, la sociedad venezolana necesita que la institución universitaria sea luz en medio de la oscuridad, guía en medio de la incertidumbre y valentía en medio del miedo y la desesperación.
Como siempre, quedamos atentos a cualquier duda que tengan, despidiéndonos con esta reflexión:
“Al enemigo siempre se lo ve grande, si se lo mira de rodillas”: José de San Martín.
Vente Universidad – Mérida
