La semana pasada escribía sobre lo que establece la Ley Orgánica del Poder Público Municipal, en su artículo 84 que el «Alcalde es la primera autoridad civil y política en la jurisdicción municipal, jefe del ejecutivo del municipio, primera autoridad de la policía municipal y representante legal de la entidad municipal».
Sin embargo, la realidad es otra, desde el año 2011 -con la homologación de las policías a nivel nacional, y con la entrada en vigencia de la Ley Orgánica del Servicio de Policía y del Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana-, prácticamente se le eliminan las competencias de los Alcaldes que tienen en sus municipios policías, ya que estos pasan a regirse por completo por las directrices que emane el ministerio con competencia en el área.
Es tanto así, que ni siquiera el Alcalde decide quien será el Director del cuerpo, ya que debe enviar al Ministerio del Interior y Justicia una terna de postulados y este es quien decide quien puede ocupar el cargo.
Acá queda demostrado, que el régimen siempre ha buscado centralizar la administración pública, creando una carga burocrática para el Estado, mediante la cual no se permite que exista una gestión clara, honesta, transparente y eficiente.
El trasfondo de esta centralización es quitarle competencias a las Alcaldías que han sido contrarias al régimen, con lo que se demuestra el carácter poco democrático que durante más de 20 años ha demostrado quiénes hoy mantienen secuestrado el poder en Venezuela, ya que cuando los resultados les son adversos, no los reconocen y automáticamente montan un organismo paralelo a las gobernaciones o alcaldías, al que ellos denominan «protectores».
En la actualidad, la Policía del municipio Barinas solamente cuenta con 138 funcionarios, y deberíamos tener al menos 1.200 funcionarios policiales (De acuerdo a la Oficina para Drogas y el Delito de la Organización de Naciones Unidas, ONU deberían existir 300 policías por cada 100 mil habitantes). Los malos sueldos, desmejoramiento de condiciones de funcionamiento, falta de dotación, abandono de la infraestructura de la sede (los baños están clausurados), han influenciado a que de ser casi 500 funcionarios, pasara a una cifra que si acaso supera la centena de policías municipales.
Sin embargo, y pese a las limitaciones a las que se enfrentan nuestros policías, más del 90% de ellos se han superado y se han convertido en profesionales, lo que les permitirá en un futuro próximo y por meritocracia, ocupar cargos de jerarquía y dirección, así como ser partícipes de la transformación hacia el cuerpo de policía que necesita y merece el municipio Barinas.
¡Barinas, piensa en grande!
César Tablante
TSU en Contaduría Pública
Coordinador estadal de comunicaciones de Vente Barinas
@cesartablante