El ciudadano venezolano ha sido el principal protagonista en todo el apoyo que se ha conseguido de la comunidad internacional, desde el que salió a protestar, hasta las valientes víctimas del régimen, ciudadanos que con coraje se atrevieron a brindar sus testimonios y demostrar ante las comisiones de la ONU, la continuada y sistemática violación de los DDHH en Venezuela.
Nuestra gente lo ha dado todo; votó, reclamó, protestó, marchó, tomó las calles, acorraló al régimen una y otra vez, como en años anteriores (2014-2017) y lastimosamente los negociadores de oficio enfriaron el asfalto, desvirtuando las protestas y tergiversando el objetivo principal de las mismas, es decir, la salida del narco régimen.
Hemos visto que ante la crisis inducida que vive nuestro país, en diferentes estados han surgido protestas espontáneas, protestas donde la ciudadanía en una sola voz aclama libertad y justicia, pues la gente entendió desde hace mucho tiempo que con condiciones mínimas o máximas, con criminales de lesa humanidad no se va a farsas electorales; que la hoja de ruta planteada hace más de año y medio por el Presidente (E) se convirtió en una agenda burlesca, al parecer, pues toda Venezuela y la misma comunidad internacional está clara de la actitud tibia del interinato.
Por eso es menester que el ciudadano se mantenga firme en su derecho a alzar su voz, a exigir libertad y justicia, a exigirle al parlamento nacional, al mismo que está por terminar su período, a que sean responsables y avancen de una vez por todas con la aprobación del Tiar y el Artículo 187 #11, en vez de buscar de forma oportunista montarse en las olas espontáneas de protestas para enfriarlas y llevarlas a formar los fulanos comandos electorales, pues para aquí hablar de elecciones libres, primero debemos lograr el cese de usurpación, el desalojo de las mafias y grupos terroristas del territorio nacional y el rescate de las instituciones, es decir, pasar por una transición real.
Desde Vente Venezuela continuaremos haciendo el llamado al parlamento, al interinato y especialmente al ciudadano que demanda libertad, que la ruta para la libertad es la Operación de Paz y Estabilización, promovida con la fuerza interna y externa, pues con terroristas y criminales de este tipo no se puede andar con medias tintas; o somos libres, o somos libres, pero intermedios no quiere Venezuela…
«La verdad nos hará libres»
Lcda. Mercedes Ramírez
Afiliada de Vente Táchira