Los ciudadanos del municipio Machiques de Perijá, no sólo sufren las consecuencias de un régimen totalitario que se empeñó en destruir todo el aparato productivo, sino que vive la mayor represión en contra de un pueblo que se niega a arrodillarse ante los tiranos.
Machiques era reconocida a nivel nacional por ser un municipio agropecuario por excelencia, en sus tiempos de mayor productividad llegó a producir un millón de litros de leche diarios. Ésta fue reconocida también por tener el frigorífico más moderno de Sur América. Actualmente, todo el aparato productivo se encuentra devastado, llegando al cierre total de sus principales industrias.
Un municipio donde el socialismo se afincó con toda su furia, donde el sistema eléctrico es caótico, el agua potable sólo llega a un 15% de la población, el resto de los servicios públicos en decadencia; a todo esto, se le suma el resto de problemáticas a nivel nacional. Ante la publicación del decreto realizado hace algunos días, donde la usurpadora del régimen en el municipio, la Señora Betty Cifuentes de Zuleta prohíbe la venta de combustible, apertura del comercio y el libre tránsito, se comenzó a evidenciar aún más la falla en el sector agropecuario.
Siendo este un municipio agropecuario afecta la tan mencionada “soberanía alimentaria”, imposibilitando al productor llegar a la unidad de producción, y a su vez sacar los productos y distribuirlos.
Ante esta realidad el pueblo de Machiques le envía un mensaje al resto de Venezuela, pese a toda esta embestida brutal del régimen se mantiene luchando y produciendo para garantizarle a los ciudadanos los productos lácteos, al mismo tiempo que lucha por la libertad y reconstrucción del país.