En medio de una pandemia sin precedentes a nivel mundial, como lo es el Covid-19, los pueblos del mundo han perdido el optimismo y la esperanza, conduciendo a la ciudadanía al desánimo y la desesperación. Venezuela es uno de los países más afectados por esto.
La falta de empleo, la problemática de los servicios básicos, la ausencia de dinero para adquirir alimentos y la privativa preventiva impuesta por el régimen nos deja en una encrucijada de situaciones que nos desaniman y nos hacen perder la esperanza.
Es triste ver cómo nuestros ciudadanos se desploman ante una situación que día por día se empeora, llevándonos a pensar que no existe una solución. Tal circuntancia vulnera nuestras vidas, y los seres que hoy usurpan el poder solo buscan aprovecharse de la situación para destrozar silenciosamente nuestras mentes y el espíritu. Por ello es necesario reaccionar a este problema que es de todos, se requiere del apoyo de todos los involucrados, ante una catástrofe social que pasará a la historia como una de las peores de América y el mundo.
Cómo activar nuevamente nuestro optimismo y la esperanza, muy fácil: ¡Sobreviviendo a ella! Y nos preguntamos ¿Cómo? a sabiendas que la respuesta estuvo siempre en nuestras manos, pues nosotros podemos detener lo obstáculos que nos impiden avanzar, con entusiasmo y fe en nosotros mismos primeramente, lograremos quitar de delante de nuestro andar, los impedimentos que nos privan de ser grandes, tener salud, alcanzar la plena prosperidad y sobre todo ser feliz.
Dejemos de creer solo en los demás, y comencemos a también creer en nosotros, pero sobre todo, ayudemos a creer a nuestra gente que existe una esperanza de la libertad plena, que nuestra lucha no solo es contra carne y sangre, es también espiritual y emocional.
Vamos pues, demostremos que podemos vencer las adversidades y obtener todo lo que nos propongamos.
Antonio Bermúdez
@chefbermudez