En la historia de la humanidad el miedo y las preocupaciones han sido muy normales, pero cuando ya son intensos y excesivos constantemente ya la situación se complica. En algunos casos es tan fuerte la ansiedad que la respiración se agita, la sudoración es excesiva, en algunas personas se genera taquicardia y en ocasiones sensación de cansancio en ciertas situaciones.
Todo este cuadro ya es muy conocido por las mayorías, ya que la ansiedad es muy común en la modernidad, para ello siempre han existido medicamentos y técnicas para controlarla, pero por más que se ha hecho, las circunstancias que se vive día a día no permite que ésta desaparezca.
La ansiedad junto al estrés han sido de los motivos que generan patologías que con el tiempo se agudizan y llevan a estados depresivos, alcohólicos, suicidas entre muchos otros. Por ello el control de ésta es tan importante.
Técnicas para controlar la ansiedad existen; el yoga, la meditación, el mindfulness, entre muchas han dado al humano moderno una excelente oportunidad para llevarla a menos y tener una mejor calidad de vida. Pero la realidad que se vive en Venezuela y en el mundo no nos permite llevarla a cero, al menos que nos metamos en un templo y nos aislemos de la sociedad.
La ansiedad ha sido parte de nuestra historia evolutiva, es casi imposible desaparecerla, pero si tenemos la voluntad podemos encontrar una salud mental que nos permita controlarla y así no ser llevados por los avatares de los hechos que no dependen de nosotros.