Todos coincidimos en que la recuperación económica de Venezuela se percibirá muy rápido, siempre y cuando llevemos al país hacia una economía de Libre mercado, y no a continuar con el estatismo que permita retornar a las mafias chavistas al cabo de unos años. Pero, sin duda alguna, se sentirá en un lapso de tiempo corto, un impacto económico favorable para todos los sectores de la sociedad.
Existe un punto que poco se profundiza y es el ¿Cómo encontraremos la administración pública del país? A pesar de que podemos predeterminar la catástrofe administrativa y algunas cifras, serán incalculables los montos que sin control interno administrativo, fueron dilapidados en estos últimos 15 años en nuestro país.
Se puede decir en este momento crucial con toda responsabilidad, que el defalco a la nación es “Inauditable” y que no hay cifras exactas de los ingresos por efecto de la renta petrolera, y menos de la malversación de dichos recursos. Para poder auditar Pdvsa, Sidor, Ministerios, Gobernaciones, Alcaldías, Cantv y todas las empresas en manos del régimen, se necesitan tener manuales de normas y procedimientos, las conciliaciones bancarias, órdenes de pago, soportes de pago, órdenes de servicio, es decir, un sin fin de documentos que no existen y que de existir seguramente no serán fidedignos, a lo que podemos concluir que será un desierto de información que hará imposible obtener los papeles de trabajo necesarios como evidencia para dar un dictamen dada la inexistencia, confusión y ausencia de soporte con los cuales emitir un juicio objetivo.
Todo esto sin contar con los miles de bienes tangibles en estado de destrucción y la desincorporación de otros que no pasaron por los procedimientos regulares y que esto representa cantidades exorbitantes de pérdidas a la nación. La provisión de cuentas incobrables por parte de la Banca Pública es muy elevada y hoy no se ve reflejada por efectos de inflación no aplicada a esas deudas, el control en la cartera crediticia, registros financieros, registros contables, etc., y todos estos sin mencionar las miles de empresas de maletín de los casos Cadivi.
Después del día D, comenzará una tarea titánica, que será tratar de cuantificar los millones de dólares desaparecidos por concepto de corrupción, por parte del régimen chavista que acabó con Venezuela y la concientización en todos los organismos públicos, para así lograr establecer en todos los niveles de los diferentes cargos de los distintos gobiernos central, regional, municipal, parroquial y sectorial una política de corrupción cero.