El 30 de abril y 1 de mayo, los venezolanos sufrimos una traición gigantesca donde se fraguó la conjura para instalar un gobierno de cohabitación con quienes han separado a millones de familias venezolanas, contribuyendo con esta tragedia que vivimos hoy en día. Nos enteramos, según Elliot Abrams, que se estaba negociando con los esbirros de Maikel Moreno, Padrino López, Hernández Dala y según ciertas fuentes, Néstor Reverol para supuestamente encontrar o pactar una salida.
De este hecho solo tenemos versiones de un violador de derechos humanos, como lo es Christopher Figuera, vocero calificado del régimen. Mientras tanto, no tenemos una versión oficial de la dirigencia de la oposición involucrada en este hecho nefasto. Yo me imagino que esto es parte de los acuerdos que se están llegando en Barbados, con observación de los representantes que han legitimado a las FARC en Colombia, siendo parte de la sociedad colombiana después que violaron, persiguieron y torturaron. En fin, ellos están dentro de la sociedad colombiana en base de la impunidad, el cual son protegidos por los regímenes totalitarios de Cuba, China, Nicaragua, Rusia y Venezuela, los cuales cuando ven que alguno de los países miembros del foro de Sao Paulo, están en peligro, comienzan a promover la justicia transicional por parte de quienes la ultrajan y otros por parte de quienes la entregan. Entonces, comienzan a implementar estrategias de colaboracionismo en diálogos, elecciones y negociaciones para que alguno de los países miembros tenga tiempo y oxígeno, como lo hacen con Venezuela.
Para mayor ejemplo, vimos cómo a partir del acuerdo de cohabitación el 30 de abril, se conoció que el segundo al mando del chavismo, Diosdado, no estaba en ese acuerdo. Inmediatamente se fue a La Habana – Cuba a reunirse con Díaz Canel y Raúl Castro para establecer un pacto de venganza entre el Cartel de los Soles y el Foro de Sao Paulo. Así podrían encontrar cómo desestabilizar, teniendo como punto de proyección Venezuela, a las democracias de occidente, específicamente las de Donald Trump, Iván Duque, Jair Bolsonaro, Mauricio Macri en la ruta que estas naciones acordaron en enero con el presidente Juan Guaidó, que era la ruta de la liberación de Venezuela con una coalición internacional en misión de paz. Además, Diosdado Cabello en forma de venganza está proponiendo sacar a Maduro para él ser el presidente de Venezuela, es decir, el estatus quo, el régimen queda igual o peor. A eso me refiero cuando les hablo de justicia transicional con base a la impunidad y que no se haga justicia con este régimen. Déjenme decirles: LO LOGRARON.
En mi opinión personal, el día de hoy se ha vuelto a traicionar a los venezolanos anunciando otra vez la conjura para seguir en la instalación del gobierno de cohabitación, invocando la justicia transicional con base en la impunidad macabra, por un lado, anunciando el reingreso de Venezuela al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), jugando con la alegría, esperanza y emoción de toda una Venezuela cohesionada por haber retomado la ruta del 233.
Resulta que eso fue un caramelo envenenado que vino utilizando una herramienta tan valiosa como lo es el TIAR, para convertirla en un pote de humo en el anuncio de que los diálogos continúan vivos en Barbados con la mediación de Noruega. Un país que no reconoce a Guaidó como presidente encargado.
Al parecer, el dolor les duró una semana para la sentadera.
TIAR + diálogo = ¿Cómo se come eso? En ese cuento quieren meter a todo un país. Lo volvieron a hacer, esto le envía un mensaje de confusión a las democracias de occidente, la Fuerza Armada y la población venezolana.
Después del informe de Bachelet, la falsa oposición legitima al dictador de esta manera. Es la Impunidad Macabra.
A los que apuestan a farsas elecciones, falsos diálogos, les digo no puedes estar con Dios y con el Diablo. Una de dos.
Benjamín Cerrada,
Coordinador de Organización Vente Joven Guárico