Hoy Venezuela vive otro panorama político diferente al del 23 de febrero y respira un aire de libertad muy distinto al que se tenía hace más de un mes. Al hacer un balance de los últimos días podemos destacar que la juventud es la que está a la vanguardia en esta lucha, y es por eso precisamente que el cambio en la conducción política muestra con claridad que es lo que necesita el país, la salida total del socialismo, de todo ese estatus quo que tanto daño ha generado.
Lo que está pasando en el país no es una simple coincidencia o golpe de suerte, porque con asertividad se está materializando la libertad de Venezuela de una vez por todas, el espacio y el tiempo nos han jugado a favor, porque el bien siempre se impone ante el mal y la ruta del coraje ha sido clara, para que todos los factores políticos, institucionales, civiles y militares se dieran cuenta que en Venezuela hace falta más que un twit para sacar a quien usurpa el poder en Miraflores, que no son suficientes 280 caracteres para lograr en verdad el cese de la usurpación, sino la coherencia, los pensamientos firmes, el honor.
Jóvenes como los de mi generación no han podido vivir en verdadera libertad, sino que un régimen asesino les ha robado el futuro y la libertad, obligando a muchos a irse y a otros nos ha tocado la labor de luchar sin descanso por materializar la transición política definitiva en el país. La presidencia de Juan Guaido ha tenido grandes avances y una buena efectividad, con solo 35 años y dos periodos legislativos como experiencia, pero no es solo la lucha de él, sino la de todos y cada uno de los jóvenes que soñamos con vivir en libertad en una Venezuela prospera.
En días pasados se mantuvo a flor de piel un sentimiento que se traduce en esperanza, un sentimiento de reencuentro porque nada estará en normalidad hasta recuperar el abrazo en familia y más aún si no hay libertad. Las recientes declaraciones de los países de la región demuestran el compromiso que existe con nuestro país a pesar de la situación interna del país, antes nunca habíamos escuchado con tanta contundencia un Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos pronunciarse sobre la situación de Venezuela y fijar una postura clara en contra del régimen totalitario de Nicolás Maduro.
En días pasados el presidente Juan Guaido sostuvo una serie de reuniones con los países de la región para fortalecer alianzas entre los países vecinos y Venezuela, demostrando que el miedo quedo en el pasado y que la comunidad internacional busca la liberación de los venezolanos que están dentro y fuera de las fronteras del país y que Maduro se quedó solo con sus mafias, carteles criminales que también vamos a sacar, porque vamos con todo.
El chavismo solo ha sido capaz de lograr un objetivo y es acabar con el futuro de millones de jóvenes, pero hoy la esperanza impera sobre el odio y los resentimientos, ahora los jóvenes nos estamos involucrando en la política porque todo necesita un contrapeso y los ciudadanos organizados son el contrapeso de una democracia moderna que vamos a recuperar, luchando codo a codo hasta lograr el cese de la usurpación porque no hay vuelta atrás.
Vivimos la llegada del presidente a Venezuela ya que lo garantizaron dos actores: la ciudadanía y la presión internacional, el paso por Maiquetía no es más que una muestra de que el régimen vive de simples amenazas y que la cadena de mando está rota ya que el comandante en jefe es otro. Queda de nosotros seguir la ruta del coraje, porque con fuerza es que salimos de esto y con un espíritu joven decidido a avanzar hasta lograr la libertad. No ha sido fácil y por ello es momento de aumentar la presión con la activación del articulo 187#11. Es momento de mostrarle al mundo que nuestro compromiso sigue y sigue porque ¡vamos con todo!
Coordinador de Vente Joven Los Salias
@mborsegui