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(Coro. 08/05/2017) El abogado y coordinador político de Vente Venezuela en el estado Falcón, José Amalio Graterol, dirigió este lunes una carta pública a la gobernadora de la entidad, Stella Lugo, a quien responsabiliza del caos y la represión en la región. A continuación, la misiva:

Carta abierta a la señora Stella Lugo de Montilla

Me dirijo a usted públicamente para que prevalezca la verdad sobre lo que acontece en el estado Falcón. Usted pretende distorsionar la realidad con sus acostumbradas falacias en sus extensas peroratas radios televisivas.

Es un hecho irrebatible y claro que usted y su esposo Jesús Montilla han manejado a su antojo la gobernación del Estado durante más de 16 años sin contraloría, ni freno de ningún tipo. El Consejo Legislativo del estado Falcón y el Poder Judicial han estado a su servicio, así como el gobierno central, de la mano de Hugo Chávez y Nicolás Maduro. Desde Juan de Ampíes y Manaure hasta nuestros días nadie ha tenido más poder en Falcón que los esposos Montilla Lugo, y ninguno ha hecho menos que ustedes.

Todos esperábamos el vencimiento de su período (diciembre de 2015) como gobernadora para que terminase la pesadilla de su pésimo gobierno. El CNE, en espuria  actuación,  resolvió  prorrogar su “mandato” indefinidamente junto a todos los gobernadores, violando la Constitución, las leyes y los principios de alternabilidad universalmente aceptados en el mundo civilizado.

A pesar del inmenso poder que han usufructuado, su obra se reduce a la nada, mera publicidad, desdén, desprecio y desidia. Así, una vez concedida la fraudulenta prórroga indefinida de su “mandato”, continuó arrasando con el orden jurídico y la racionalidad en el manejo de la cosa pública. Su atrevimiento llega al extremo de referirse  a obras imaginarias de su gobierno, afirmando que la culpa de los males de Falcón es responsabilidad de quienes nos hemos opuesto a su funesta gestión.

Usted es la responsable del desastre con el agua potable y servida (derecho humano), un aspecto generador de amibiasis, sarna, dengue, chikunguya y zika en el estado, a pesar de los millones de dólares malversados y apropiados. Ante las muertes que producen el mal estado de los alcantarillados, pide que esos hechos no se politicen y no corrige nada, los agrava sin lugar a dudas.

El horror que se vive en los hospitales y centros de salud es por gravísima falta suya, indolente ante el sufrimiento humano, malversando los presupuestos para medicinas y atención a la gente, mientras los pacientes mueren a mengua.Su administración se divierte con el poder y lo disfrutan con placer.

El estado de la vialidad del estado y de las calles de las áreas urbanas es deplorable, la cantidad de dinero gastada no se utilizó en beneficio de los falconianos. La seguridad personal es un rojo manchón de violencia en el desempeño del gobierno, miles de familias asediadas y diezmadas por el crimen y ustedes disfrutando su poder y sus vidas y bienes a buen resguardo. Desde allí, desde sus sitios seguros, ven a los falconianos pasar hambre y no sienten ni siquiera compasión.

Su  gobierno autoritario y lleno de poder como ninguno en la historia, ante el reclamo de la gente, ordenó reprimir a los falconianos, a sangre y fuego, y ahora pretende culpar a quienes nos oponemos a su nefasta gestión por los hechos vandálicos  ordenados a sus paramilitares para aterrorizar a los ciudadanos. Todo Falcón sabe que su lugarteniente, el alcalde de Coro, Pablo Pito Acosta, es su protegido y obediente servidor, quien además de ser un ineficiente y derrochador alcalde, sostiene y da instrucciones a los grupos de choque (paramilitares) contra la población. Su gestión de gobierno, como la de su alcalde, es un fracaso total y será recordada por sus largas chácharas y errática conducta. No tenemos nada que agradecerle a usted y a su alcalde Pito, pero sí mucho que reclamarles.

Es de hacer notar que ante la crisis política desatada por la violación de la Constitución, los derechos humanos y el lanzamiento de los paramilitares para reprimirnos a todos han tenido la ocurrencia de señalar como culpables de la violencia precisamente a quienes somos víctimas de ella. Eso solo se le puede achacar a quien ha hecho tanto uso del poder con odio incontenible contra los falconianos.

Ahora que la Fiscalía del Ministerio Público, al no hallar delito en las protestas estudiantiles, no los acusa, usted se ha lanzado a transformar la rebeldía juvenil en delitos militares, violando la Declaración Universal de los Derechos Humanos e incurriendo en delitos de lesa humanidad. Tanto tiempo en el poder les hace pensar que permanecerán, pero permítame decírselo: están en los días finales. El noble pueblo falconiano es valiente y hará frente al atropello más bestial cometido contra los jóvenes, firme y sin miedo.