Pudimos observar en recientes días la actuación magistral de Venezuela en la Organización de Estados Americanos (OEA), sobre la situación que aqueja a millones de venezolanos y para nadie es un secreto: que estamos atravesando una dictadura feroz que a todo pulmón quiere acabar con la constitución. Claro, más de lo que ya la han marginado, a esa niña que tanto aman ellos, en realidad es maltratada una y otra vez. Escuchando las declaraciones de Míster Moncada en la OEA me dieron a entender una cosa: Y es que este país sigue por la misma vía del comunismo y socialismo. Lo que nos resulta interesante es la necesidad que tiene el régimen de maduro de salir de la organización como sea, aislando internacionalmente a la nación.
Actuación triste fue la de los representantes de Bolivia y Nicaragua que en cada oportunidad que el representante de Belice les concedía el derecho de palabra tenían el mismo discurso que parecían disco rayado. ¿Pero es que acaso la dignidad de los pueblos está consagrada en modo de desarrollo de país? Por su parte, Míster Moncada exigía una y otra vez lo mismo, suspender la sesión, mientras miles de venezolanos quizás eran o son víctimas del hambre y la inseguridad.
Por su parte felicito al Secretario General por su discurso que lleno de fortaleza para mi espíritu de lucha libertario por el cual aplaudo; mientras los representantes de Bolivia, Nicaragua y Venezuela no querían entender que primero se votaba y después se discutía. Es impresionante la capacidad de entendimiento de estos seres humanos, pobres vagos sinvergüenzas que fueron a plantear una Venezuela que supuestamente era potencia, pero que en realidad venía en decadencia a la hora de hacer políticas públicas. Hace mucho tiempo atrás, y me refiero al día lunes 27 de marzo, Delcy Eloina fue a hablar sobre Venezuela, pero como que no entendió lo que pasaba que hablo de otro tema, a lo que Paraguay le respondió: «Mire compañera en mi país se hizo un JUICIO POLITICO mas no un Golpe de Estado».
En estos días previos al Consejo Permanente, uno de esos diputados inconscientes del tema país, perteneciente al partido de gobierno, estuvo en un programa de televisión y dijo que esto no era una crisis política sino que simplemente era una coyuntura económica que pasaría. Me pregunto, ¿será que este diputado no compra su clap? Días antes, igual otro guaricho, insinuó que en Venezuela la gente no comía de la basura. Pregunto, ¿será que al compañero hay que darle un recorrido por las calles de Venezuela?
Siguiendo con el tema de la OEA pudimos ver a un Nicolás Maduro derrotado y celebrante, sí, celebrante, porque aseguro que esa carta «no fue aprobada». Pareciera como si Maduro no leyera la prensa internacional por miedo a que le digan que habrán otras sesiones.
Pero seguimos en lo mismo: Venezuela, Bolivia y Nicaragua exigiendo suspensión de dicha sesión y pidieron votación al respecto. A la sorpresa de Míster Moncada, fue aprobado el orden del día y no pudo hacer más nada al respecto.
Viéndose derrotado, el pobre historiador habló tanta necedad que los países se fueron retirando y logró por poco su cometido, pero para sorpresa de Míster Moncada la sesión seguiría en días después.
Pero las cosas no culminan allí, días después el bufete de abogados del gobierno nacional eliminó la inmunidad parlamentaria de la Asamblea Nacional, apostando a ganador para impedir que los diputados y diputadas electas el 6D no hablaran las maravillas del país, cosa que a los diputados hermanos de la MUD no les gustó.
Otro caso de tristeza fue lo ocurrido en Mariguitar, municipio Bolívar, donde fuerzas del mas allá intentaron acabar con el alcalde sacándolo a la fuerza del despacho, pero los espantapájaros del gobierno se consiguieron con la sorpresa de que allí había un bravo pueblo defendiendo su autonomía comunista porque son Ciudadanos Libres.
En fin esa es la triste historia de las Glorias Fracasadas Que Tuvo el Gobierno en la OEA y me despido con una frase que algunos atribuyen a Teodoro Petkoff que dice: «Estamos al borde del abismo y daremos un paso adelante».
@JSodja