Preocupados por el momento que vive nuestro país, uno de los más oscuros de nuestra historia, en Vente hemos comenzado como organización una campaña a nivel nacional para protestar por las medidas de control que el régimen quiere implementar y hacer un llamado a la ciudadanía a tomar conciencia de la grave situación que vivimos. El problema no es sólo una medida de control como lo es el capta huellas, sino el sistema político y económico que están implementando en Venezuela y que históricamente ha fracasado, tal como vemos que sucede hoy en nuestro país.
Las acciones que estaremos desarrollando durante el transcurso de la semana comenzaron hoy 1ro de Septiembre con el pronunciamiento público de nuestra organización en el Táchira, y en cada uno de los Estados, la publicación de un comunicado y continuaran con la entrega de un documento en la Superintendencia Nacional de Precios Justos (SUNDDE), además acompañamos estas acciones con volanteos y pancartazos creando conciencia en la ciudadanía sobre el origen de la problemática que nos afecta.
La pobreza, miseria, escasez, corrupción, el contrabando no se combaten con más controles, precisamente son consecuencia de controles excesivos por parte de una administración centralizada, que sigue un libreto cubano y que ha demostrado fracasar en todos los países donde ha sido implementado, sirviendo únicamente para coartar la libertad de los ciudadanos.
En el caso particular de nuestro Estado la situación del contrabando es también crítica debido al diferencial cambiario, nuevamente la solución a esto no es aplicar más y más controles, sino cambiar completamente el sistema, los controles en el sistema de precio lo que producen es contrabando y mercados negros, ya que los precios reales se rigen naturalmente por la libre relación entre individuos. Mientras en los países prósperos se produce y se exporta, en nuestro país se expropia, se roba, se saquea y se limita la producción y la inversión. Mientras un gobierno interfiera en la economía, en el sistema de precios, continuaran estos problemas, la solución a la escasez, el contrabando y la miseria, es un sistema de gobierno que permita un libre mercado, que incentive la producción y que permita a los venezolanos exportar nuestros productos, generar prosperidad y competir internacionalmente lo que reduciría ampliamente el diferencial cambiario.
San Cristóbal, 1 de septiembre de 2014
Comunicado Público a la Superintendencia Nacional de Precios Justos (SUNDDE)
Nosotros, ciudadanos que luchamos día a día por el rescate de la libertad en Venezuela, nos dirigimos a ustedes en uno de los momentos más oscuros de nuestra historia, signado por la peor de las crisis económicas en años y que obedece al control de nuestra economía a partir de políticas retrógradas y profundamente centralistas que lo único que han logrado, de manera intencional, es la destrucción del aparato productivo nacional, por medio de expropiaciones traducidas en robo y saqueo, restricciones al libre acceso de divisas y desestimulo a la inversión.
La historia ha demostrado que la economía centralmente planificada lo único que trae es miseria y pobreza entre los ciudadanos mientras las élites corruptas se enriquecen y hacen todo por mantenerse en el poder. Todo esto se traduce en escasez, inflación y corrupción, los principales males que hoy aquejan a los venezolanos. Pero no es menos cierto que la historia ha demostrado el fracaso de ese modelo y que la libertad es inherente al ser humano y por más que existan los controles, siempre buscaremos aquello que nos haga libres en la búsqueda de nuestra felicidad.
Estamos convencidos de que la solución de ésta crisis pasa por la eliminación de todos aquellos controles que interfieren en el libre desarrollo del mercado, capaz de asegurar por sí mismo la dinámica de la oferta y la demanda, satisfaciendo las necesidades de cada uno de los ciudadanos. Ningún precio impuesto, ninguna felicidad impuesta, ningún ataque a la producción puede traducirse en éxito económico; todo lo contrario, es garantía directa del fracaso, tal como lo estamos comprobando hoy.No es justo que seamos los venezolanos los que paguemos las consecuencias de la corrupción y de un modelo que busca controlarnos de forma absoluta, como si fuéramos una simple masa sin razonamiento, sin preferencias, en fin, sin libertad. La implementación del llamado “sistema biométrico” por medio del uso de captahuellas, que no es más que un racionamiento a la cubanamodernizado, coarta directamente nuestra libertad de escoger qué queremos consumir, violando el artículo 117 de la Constitución Nacional, condenándonos a la miseria y la humillación.
Ni las colas, ni este sistema, ni cualquier otro intento de control podrán detener la firmeza de una ciudadanía que, siendo mayoría, está dispuesta a luchar por su libertad, defendiendo el legado de aquellos próceres que dieron su vida y derramaron su sangre por conquistar la independencia. No podemos hablar de soberanía alimentaria cuando no somos más que un pueblo al que quieren someter, mientras todo lo que comemos se importa y mientras miles de alimentos se pudren en las aduanas gracias al modelo corrupto que hoy vivimos.
Por esta razón, rechazamos categóricamente la implementación de este sistema y todos los controles sobre la sociedad y exigimos de manera inmediata la eliminación de ésta medida que atenta contra la libertad de todos los ciudadanos venezolanos. Un gobierno que dedica todo su esfuerzo y que utiliza todo el aparato del Estado para limitar las libertades de sus ciudadanos, no merece el mandato. Ésta medida no sólo descarada sino también desesperada no hace otra cosa sino sumar una nueva razón para plantear una pronta salida del régimen, pacífica y constitucional, y exigir contundentemente la renuncia de los que hoy desangran al país. Mientras el mundo avanza hacia el desarrollo, Venezuela se estanca en la desidia por consecuencia de un modelo históricamente fracasado. Es momento de dar la cara al futuro, es nuestra responsabilidad y por ello estamos y seguiremos luchando.
Por una Venezuela de ciudadanos libres, nos despedimos,
VENTE JOVEN TÁCHIRA