Como hemos dicho, el chavismo es una tendencia política sumamente tramposa y ventajista. Eso no tiene discusión. Han estafado al pueblo venezolano por 15 años y su proyecto es sacarle hasta el último centavo a las riquezas del país con la ayudita de sus amigos extranjeros, especialmente Cuba. En realidad, más que tramposos son unos estafadores. Y muy buenos con el doble discurso y la propaganda, un arte en que los sátrapas de Cuba son maestros internacionales.
La historia del ventajismo electoral convertido en fraude frontal y sin pena es de record mundial en estos tiempos chavistas. Es que no pueden, se les hace imposible, jugar limpiamente. Todo lo hacen violando leyes, reglamentos, buenas costumbres o cualquier cosa que aparezca como límite moral y ético contra el abuso. En realidad hace rato que dejaron de ser gobierno para pasar a ser gobiernito y, ahora mismo, un régimen con todas sus plumas y alas. Una satrapía que ya no tiene ningún interés en que crean que es democrática. Por eso juega sucio. Por eso estafan. Por eso engañan.
Veamos algunas excelentes muestras de la maestría tramposa del régimen.
- Declara los ingresos petroleros a los fines presupuestarios hasta este año a 40 dólares por barril y el próximo año a 60 dólares por barril. Todos estos años se ha metido en el bolsillo la diferencia entre lo presupuestado y lo que realmente liquida PDVSA a un promedio por encima de 100 dólares. Tremendo asalto, caballero. Todo manejado directamente por el comandante muerto y ahora por su hijito a juro. Toda esa cifra mil millonaria se gastó, se embolsilló, se regaló sin contraloría y sin supervisión y además le robaron el dinero a gobernadores y otras instancias, pues ese ingreso diferencial entró sin pasar por Go al bolsillo del los jefes de la revolución, el llamado «mi colchón».
- Trampean con las cifras de empleo: hay entre 7 y 8% de desempleo, según los números del INE. Siempre está por ahí. Pero la mitad de la fuerza laboral vende trompos de madera y pantaletas en las calles de muchas ciudades del país. Buhonería pareja. Pero el régimen habla de seguridad social y socialismo humanista.
- Nos hablan de un bolívar fuerte y una economía estable cuando se sabe con certeza que el país está al borde del colapso: deuda consolidada por encima de 200 mil millones de dólares. Reversas internacionales en su mínimo histórico por debajo de 21 mil millones de dólares, de los cuales el efectivo no llega a 1.000 millones. Quebrados, pues. Por solo mencionar un ejemplo, el régimen de los tramposos le debe a las líneas aéreas 2.600 millones de dólares. Por eso no hay pasajes y cuando consigue cuestan diez veces más que el marcador de dólar Cadivi. Los maulas socialistas no pagan.
- Dicen que el salario mínimo es uno de los más altos del mundo, pero lo calculan a 6,30 bolívares por dólar. Todo el mundo sabe que ese papel de monopolio que es el bolívar no compra dólares en ninguna parte. Dentro del país es un delito y si logra comprarlo no será a 6,30 jamás. Otra estafa propagandística.
Y hay muchas más. Ya las trataremos por aquí. Por lo pronto hay una que es clave: dicen que ganan todas las elecciones. No es así. Hacen trampas como en todo, pero cada vez son más débiles. Hasta con su supuesto invicto mienten.
Este domingo hay un chance claro de demostrar quién dice la verdad. Y dónde está la mentira. Simplemente vote.
Elides Rojas