Cuando ya la debacle en el Sistema Eléctrico Nacional era evidente, bajo el régimen de Hugo Chávez, éste nombró como ministro de energía a un abogado, hoy desaparecido también, Rodríguez Araque , en desmedro, pero con mucha razón en particular, de un solemne flojo, descuidado e incapaz ex diputado, desvergüenza de los técnicos electricistas e instrumentistas eléctricos de este país, a los cuales pertenece ese sombrío ex diputado llamado Ángel Rodríguez, el cual fue ministro de energía por sólo 27 días. Dejó sin luz a Caracas.
Muy a pesar de todo, no sé cuál de los dos fue más irresponsable e imbécil al aceptar el cargo, si el ministro destituido o el entrante, habida cuenta de que a Chávez había que lanzarle a la cara esos nombramientos a lo loco, en vista de que el propio Chávez era el culpable del desastre eléctrico nacional.
Aún CADAFE, luego CORPOELEC, ya era un “saco roto”, la corrupción chavista había dilapidado millones de dólares y nada se había hecho en ese sector tan estratégico para el desarrollo y seguridad del país.
Como se dijo en ese entonces, el “breaker” de las empresas básicas de Guayana fue bajado y éstas no habían escapado de la quiebra nacional; sus propias plantas termoeléctricas que autoabastecían de energía a estas empresas fueron paradas, o cuya carga eléctrica fue usada en el Sistema Interconectado Nacional para alumbrar ciudades y pueblos del país, dado que no había respuesta de CADAFE para atender sus propias responsabilidades eléctricas en el sistema de alumbrado público.
Sobre este respecto, estaba en boga el fenómeno climático, la Niña, el cual según el régimen corrupto, era el culpable de todo, quizá hasta de la imbecilidad del chavismo. Asimismo una inofensiva iguana que por mala suerte ingresó a una celda de 13. Kv, (13.800 V) por una puerta mal cerrada del cubículo, se pulverizó e hizo corto circuito provocando una explosión en la celda, iguana que a cada rato era la culpable de los cortes o apagones en el país; de allá hasta nuestros días, la iguana es la “mamadera de gallo nacional”, por culpa de un régimen dictatorial y corrupto que, a lo sumo, sólo se ocupa de culpar a los animales y a los gringos de toda su locura e incapacidad chaveco-madurera.
Al mundo entero, si es menester, hay que pedirle interceda por los venezolanos. Venezuela no es Siria que la tomaron de experimento bélico, y allí quedó destruida con el mismo presidente dictatorial y su esposa británica. El mundo no debe dejar pasar a Rusia a Venezuela. Venezuela no pelea territorio con nadie ni invade, el pueblo venezolano sólo quiere liberarse de esta dictadura de hambre y miseria.