Skip to main content
immediate bitwave Library z-library project books on singlelogin official

¿Se acuerdan del Llanero solitario? Espero que sí, y que a mí no sea al único que se le caiga la cédula al piso y rebote.

Bueno, haciendo una comparación algo atrevida, y desventajosa para el famoso héroe,  Nicolás Maduro luce como una especie de “Llanero solitario”. Quien ocupa la silla de Miraflores se encuentra solo, más íngrimo que nunca. Porque hasta su entorno no le genera para nada confianza.

Maduro no cuenta con el apoyo de los ciudadanos. Cada vez que se hace un estudio de opinión los niveles de popularidad de él son pírricos y cada vez más críticos. La gente no quiere su régimen a tal punto, que si mañana hubiese elecciones sería un milagro que  llegase al 15% de los votos.

En la óptica internacional, sus amigos han perdido el gobierno. Lula Da Silva, Rafael Correa, los Kirchner, y muchos más han dicho “adiós” al poder.

Solo le quedan “amigos” por conveniencia, en el caso puntual de muchas islas del caribe que Nicolás Maduro ha comprado con ayudas millonarias y haciéndole obras de infraestructura, que aquí apenas si soñamos.

Y si nos toca hablar de Raúl Castro, podemos decir que esa amistad es algo atípica. Los cubanos dicen estar “restados” con el régimen venezolano, pero en ocasiones se sumergen en un mutismo que hace sospechar al más incauto.

No obstante, la soledad más palpable del poseedor, írritamente, del régimen venezolano, es la de sus colaboradores. Sí, vemos a mucha gente a su alrededor. Pero, la pregunta es ¿están con él? ¿Cuánto de los actuales ministros no saldrán corriendo cuando escuchen un trakitraki? ¿Cuántos no se están preparando para llegar a acuerdos cuando el tiempo de la transición llegue?

Además, Nicolás Maduro debe estar consciente de la jauría de lobos que tiene a su alrededor.

Un acompañamiento como el de Diosdado Cabello no debe ser muy grato para él. Y así, por este estilo, existen más de uno en las altas cumbres del poder político venezolano. Maduro se queda sin personales leales. Aunque, para ser justos, él también tiene sus “Toros”, como el “Llanero Solitario”, que le cuidan las espaldas.

Podemos intuir que Cilia Flores,  Ernesto Villejas, Jorge Rodríguez y su hermana Delcy Rodríguez, son parte de esa camada de “Toros”, que le aligeran en algo la soledad. A pesar de esto, y de los cariñosos “kimosabi”, él sabe que se encuentra prácticamente a la deriva en el océano de problemas y enemistades que se creó con su política totalitaria y soez.

Por más que lo niegue, las amenazas de Donald Trump le dan pánico, y frente a esto tampoco puede estar complemente confiado en los chinos.

¿Díganme ustedes si no estuvieran de igual de solos y asustados? No es para menos, por eso sería recomendable, por su salud, que Maduro renuncie a la presidencia de la república, la misma  que le quedó grande.

@wcaballerolopez