Muchos dicen que la salida de esta tragedia depende sólo de los venezolanos. Otros dicen que no aceptarán ninguna intervención extranjera para liberar a Venezuela, porque somos los venezolanos los responsables de la liberación del país. Pero está demostrado que solos no podemos y que lo que sí depende de nosotros es hacer todo lo necesario para acelerar los tiempos de nuestros aliados en conformar definitivamente una “operación de fuerzas concertadas” para expulsar definitivamente al régimen del poder.
Bien lo decía la diputada Dignora Hernández, de la Fracción 16 de Julio, a propósito de la unidad: “Esta ni se decreta, ni se suplica, ni se exige, se construye, se sostiene y se consolida”, y a esto hago referencia porque no podemos seguir permitiendo que se continúe con el chantaje de la unidad solo cuando no se quieren críticas que logren la rectificación de los errores. La unidad es de propósito, la unidad es de objetivos y en este momento solo impera un objetivo en común que no solo exigen todos los venezolanos, sino que añoran y piden a gritos, el cese definitivo de la usurpación en todo el poder del Estado.
En este momento es indispensable una operación de paz multifacética; organizar en todos los planos una Coalición Internacional Liberadora, que permita dar el paso definitivo a una transición democrática, en donde se cumpla al pie de la letra el Estatuto de la Transición que muchos ignoran, lo omiten, pero es un documento de relevancia internacional al que no se le puede dar el mismo tratamiento que al plebiscito del 16 de Julio de 2017.
Debemos direccionar la salida, y esta pasa por enviar un mensaje coherente a nuestros aliados, un mensaje claro que solos no podemos y este comienza por empujar desde la Asamblea Nacional el artículo 187 numeral 11, solo de mencionarlo hace temblar a muchos. El diputado Juan Pablo García, hoy en el exilio forzado, detallaba que: “Peores son aquellos que los adversan, nunca aceptan –por lo menos– discutirlo en las sesiones plenarias. No son capaces de ventilar públicamente sus objeciones. Aseguran que los países dispuestos a ayudarnos deben solicitarlo primero. Toda una falacia mal construida”. Argumentaba el diputado refiriéndose a sus colegas parlamentarios que al parecer, también al igual que el régimen temen una coalición internacional que al liberar a Venezuela desnude ante el mundo sus verdades y falsedades.
No queda más que seguir empujando en la dirección correcta para lograr la salida a esta catástrofe por parte del régimen. Hoy, los ciudadanos y los líderes políticos que estamos convencidos que ésta es la ruta que dará el fin a tanto sufrimiento y dolor; estamos en la obligación moral y ética de persistir en seguir enviando este mensaje a nuestros principales aliados internacionales, la conformación de manera urgente de una operación de fuerzas concertadas que garantice la libertad de Venezuela y la paz de todo el hemisferio.
@JesusFariasVen